Johan Cruyff con su exclusiva camiseta. |
La pelea constante de las marcas deportivas por vestir a los
deportistas no es algo nuevo, y va más allá que la “reciente historia” de Michael
Jordan con Nike. Ya en los años 70, Adidas, Nike y Puma recurrían a todo tipo
de artimañas para tener a los mejores vistiendo su logotipo. Y si a eso le añadimos que
esta historia es futbolística, la repercusión es mayor y las leyendas se hacen
más grandes. Johan Cruyff el estandarte del “fútbol total”, el capitán e
icono de “la naranja mecánica”, uno de los grandes de este deporte a pesar de
no conseguir ese ansiado mundial de 74, es el primer protagonista de este blog,
en el que se cuenta anécdotas curiosas, como la que protagoniza nuestro Johan
Cruyff.
La selección holandesa iba al Mundial de 1974 con su típica
indumentaria naranja y recientemente proporcionada por la marca Adidas. Pero
Cruyff tenía contrato de exclusividad con Puma. Esta marca deportiva se aseguró
a varios jugadores con su vestimenta en cada uno de los mundiales. Es decir, la
selección podría ganar el Mundial con su marca, pero las estrellas de los
equipo no podían utilizar otra indumentaria de la competencia. Antes que Cruyff,
Pelé firmó un contrato con Puma en el mundial del 70, y más tarde lo haría
Maradona en el 86.
Por estos problemas, Cruyff no quiso formar parte del
combinado nacional holandés del 74 ya que debería jugar con una vestimenta que
no le patrocinaba. El lio no era pequeño ya que Adidas, la gran competidora
desde siempre, era la ropa oficial de la “orange” y Cruyff era su mejor
jugador. Finalmente este curioso caso tuvo una solución muy sencilla. La
selección holandesa vistió con su tradicional uniforme con las tres tiras de
Adidas, mientras que Cruyff jugó todo el mundial con solo dos, confeccionada en
exclusiva para el mítico 14.Para dar más repercusión a la historia, tiempo después, en EEUU el jugador
holandés jugó con un equipo en el que las tres rayas de Adidas predominaban en
su equipación.